Atotonilco de Tula, Hgo.- El día de hoy, representantes de la empresa Cemex acudieron a las oficinas municipales a solicitar el monto por el adeudo al pago del predial de sus instalaciones en Atotonilco de Tula, mismo que no fue proporcionado por parte de los representantes de la oficina municipal quienes comentaron que, por órdenes del Presidente Municipal, esta información solamente la puede brindar él.
El representante de la empresa cementera llegó con el recibo del año 2016, solicitando el nuevo recibo del año en curso a lo que una persona en ventanilla le respondió: "Por instrucciones necesitamos que espere al Presidente Municipal, si gusta esperar él lo atenderá".
El representante por su parte cuestionó que si este era un procedimiento habitual, el que los ciudadanos tuvieran que esperar al Presidente Municipal para que se le brindara la información correspondiente, a lo que la persona en ventanilla respondió: "Sí, lo necesitan esperar a él".
Cabe recalcar que el alcalde de Atotonilco, Julio César Ángeles Mendoza se ha expresado a través de distintos medios de comunicación y por medio de redes sociales, que Cemex no ha querido hacerse responsable de este pago, a sabiendas que la empresa ha intentado en distintas ocasiones pagar el adeudo y esta información no se les ha sido proporcionada. Sin embargo, el presidente municipal ha declarado que el pago no es el correspondiente, sin tener sustento catastral ni legal sobre la cantidad que adeuda la empresa.
Durante la visita a la presidencia municipal un vocero de la empresa declaró: "Han sido constantes los esfuerzos que hemos realizado para cumplir con nuestras obligaciones como ciudadanos y como empresa con el municipio, sin embargo en todas las ocasiones el municipio nos ha querido brindar la información respecto al monto”.
Esta no es la primera vez que Julio César Ángeles, presidente municipal de Atotonilco, se ha visto envuelto en problemas similares con la iniciativa privada ya que son muchas las empresas de la localidad quienes han expresado quejas debido a las extorsiones y amenazas perpetuadas por el munícipe.